Baquedano
Zona no vascófona.
Está situado en las inmediaciones del nacimiento del Urederra, en su orilla izquierda. Lo rodea la sierra de Urbasa, menos por el S donde limita con Gollano y Zudaire.
ARQUEOLOOGÍA: En su término se localiza parte del sector dolménico de Urbasa, concretamente los dólmenes de Puerto Viejo de Baquedano I, y Zurgaina, y un yacimiento arqueológico en el lugar denominado Cueva de las Cabras. Entre los hallazgos sueltos, destacan tres hachas pulimentadas de la Edad del Bronce.
HISTORIA: Debía pecha a la Corona conjuntamente con los demás lugares de Améscoa. Su contribución en concepto de rediezmo era en 1268 la más cuantiosa del Valle.
En 1850 tenía ya escuela; sus gentes se dedicaban a la agricultura, al carboneo y al corte de madera en sus bosques, y entre sus caminos destacaban el del puerto de Urbasa, «bastante penoso», y el «de media caretera» que conducía a Estella y Zudaire. En el siglo XX se fundó una caja rural.
De la primitiva Parroquia de San Juan Bautista queda la portada de estilo protogótico con influencias del Císter propias de 1200, así como parte de los muros y el espacio interno aprovechados en la profunda remodelación en estilo gótico renacentista llevada a cabo entre 1585 y 1605 por el maestro cantero Antón de Echarri; a su labor se deben las complejas bóvedas estrelladas que cubren los cuatro tramos de su única nave. La torre es del siglo XVII, de estilo herreriano. La escultura de San Juan Bautista ostenta los rasgos del gótico tardío de comienzos del XVI, época a la que también pertenece la píxide de plata, en depósito en el Museo Diocesano de Pamplona. Un cáliz del XVII lleva punzones de D. Ortega y de Toledo; el Crucificado filipino es barroco del siglo XVIII.
Ermitas. En el lugar conocido como Santacruzarra quedan restos de la Ermita de Santa Cruz, pero este primer edificio, de origen medieval, fue pronto abandonado, erigiéndose una nueva ermita de igual advocación cerca del pueblo; su traza renacentista fue posteriormente remodelada en el Barroco.
Arquitectura civil: En varias construcciones de los siglos XVI y XVII se conservan escudos, entre los que se reconocen las armas de los Baquedano, Urra, Andueza y Azpilicueta.