- Español
- Euskara
- English
- Français
El día de la matanza
ALIMENTACIÓN, MATANZA, CERDO
El día de la matanza del cerdo era un buen día. Un hermano de su madre era el matador. Cuando lo mataban lo socarraban con ilagas para quitarle el pelo con cuchillos. Conforme caía la sangre había que estar batiéndola y quitándole las venas. La sangre que era para comer con el rancho, que era de la papada y de las lancillas, no se batía, sino que se dejaba cuajar. Luego se cocía y se partía en trozos pequeños. Después de quitarle el pelo al cerdo se le daba la vuelta, se le quitaban las pezuñas y se habría por la mitad. Se le sacaba el mondongo y se llevaba a lavar en el río. Se separaban los intestinos delgados de los gordos. Se colgaba el cuto y a la tarde venían a pesarlo y a trocearlo.